viernes, 21 de agosto de 2015

De la abundancia del corazón...

La verdad nunca tengo bloqueo de escritor por dos razones, una es que no escribo un libro, y la segunda es que el entorno da tema suficiente para poder hacer 3 publicaciones al día, no las hago porque ya es latero leer una imagino más. Bueno a lo que vinimos.




Me llama profundamente la atención como la gente es capaz de ponerle de su cosecha a las cosas, en la Biblia hay un texto que dice: De la abundancia del corazón habla la boca, pero me gustaría actualizarlo (espero no ser llamado anatema) y decir que “de la abundancia del corazón escribes en Facebook”.

Facebook es la nueva plaza de armas de las ciudades, en este se puede jugar ajedrez, escuchar música, ver un show payasos (en video), y también ponerse a hablar de lo que sea, en algunos casos se acerca un grupo de personas a meter la cuchara y en otros nadie pesca, hay veces que el grupo es más grande y hay veces en que las cosas se comienzan a salir de control. (NOTA: todo esto pasaba en la plaza de armas hace unos 20 años, algunas cosas aún quedan).

La verdad en lo personal encuentro que es súper bueno que Facebook pueda funcionar de esa manera porque da un espacio que muchas veces no existe para las nuevas generaciones, donde se pueden expresar, conversar, enojar, investigar y aportar a temas como política, reformas, religión, salud, etc.

¿Cuándo a mi criterio esto se pone denso?
Cuando producto de haber comenzado algo que no se tenía la capacidad de controlar, los post comienzan a desvirtuarse, los amigos/hermanos comienzan a enojarse, se comienza a caer en la descalificación y en la mala interpretación de lo que el otro quiso decir, comienzan a armarse grupitos (esto me llama mucho la atención), y la hermandad, la amistad, el deseo de tener una interesante discusión toma un segundo lugar y lo importante es pelear/pelar/enojarse/humillar/ofender/etc.

¿Cómo actuar respecto de esto?
Pienso que lamentablemente hay personas que no tienen la madures para usar Facebook, sé que suena ridículo, pero lo creo de verdad, personas que escriben sin importar dañar y no ven el peso de sus palabras, personas que comienzan a mal interpretar y no tienen comprensión lectora, personas que hacen un bando y comienzan a ofender a los demás. No son capaces de participar en un foro on-line, de una discusión virtual, no están preparados para Facebook. En la escritura hay 2 textos que recuerdo con respecto a esto:


En conclusión, no debemos prestarnos para ser de maldición, sino solo de bendición, cuando comentamos veamos que lo que queremos decir es guiado por la pasión y eso va a ocasionar división, pelea o mala onda. Contemos hasta 1000 y calmémonos, no olvidemos que tenemos que ser luz, y lo que escribimos no solo lo ven nuestros amigos sino también gente que no conoce al Señor y al ver este tipo de encontrones menos van a querer acercarse a Él.


0 comentarios:

Publicar un comentario